Julio 2020. ¿Qué Pasa Con El
Transporte En Venezuela?
Caracas 26/07/2020. El transporte público
manejado por operadores privados en el país vive un drama perpetuo, Los 4
últimos años han sido muy malos para el sector automotriz y el transporte
público de pasajeros, cada vez se producen menos vehículos en Venezuela, casi
todas las ensambladoras, carroceras, los talleres mecánicos, ventas de
repuestos y autopartes, el sector comercializador están cerradas y aunque la
Empresa Japonesa Toyota anuncio el reinicio de sus actividades, por el Covid-19
no ha podido hacerlo.
Los años 2018-2019 fueron años conflictivos y muy
duros para el sector transporte, el estado decidió congelar la tarifa, eliminar
el dólar preferencial para el sector transporte y el subsidio estudiantil por
las razones siguientes: 1ero) Los sueldos, salarios y pensiones que
devengan los trabajadores venezolanos se ubican entre los más bajos en el
mundo. 2do) La caída de los precios del barril de petróleo unido a una
disminución drástica de capacidad de producción y refinación de la
estatal Pdvsa, deja al estado sin importantes ingresos en divisas. 3ero)
Controlar la aguda hiperinflación implica reducir la emisión de dinero
inorgánico, disminuir drásticamente los niveles de liquidez (dinero en billetes
circulantes) y aumentar el encaje legal. 4to) Una persistente recesión y
contracción de la economía obliga a ajustes estructurales significativos, No cosméticos.
5to) Y en este año 2020 la aparición de la Pandemia generada por el Covid-19
fuerza a restringir drásticamente el contacto social, el tránsito, la
movilidad, el transporte de los venezolanos. Al entrar la economía mundial en
recesión, se contraen los gastos de inversión y. como consecuencia de los efectos
negativos post-pandemia se debilitaran aún más la economía venezolana.
Para el sector del Transporte público y los
operadores privados del mismo en Venezuela la contracción de ingresos ha sido
brutal y sin programas oficiales inteligentes y consensuados de recuperación y
apoyo su crisis se agudiza en relación directamente proporcional a la
prolongación de la cuarentena,, lo cual implica un deterioro mayor de un parque
automotor, ya para este momento el más viejo de América Latina y acelera la
desaparición progresiva de un creciente número de unidades circulantes. Estiman
que la reducción alcanzó el 80 % de las unidades existentes hace apenas 4
años (entre 2016 y 2020), compensado absurdamente por la emigración forzada de
entre 4 y 5 millones de personas, habían cada vez menos unidades y la
aguda contracción de la capacidad de pago de los usuarios, redujo agudamente la
demanda pero, al existir cada vez menos unidades, las pocas existentes se
saturaban de usuarios, lo cual implicó una sobreexplotación de ellas y acelero
su deterioro, se recibían cada vez menos
ingresos por la inflación y la devaluación y se experimentó un crecimiento
exponencial del gasto y de los costos operativos de mantenimiento de las unidades
El sector automotriz y el transporte público de
pasajeros juga un rol importante dentro de la economía de un país, su
desarrollo genera ingresos fiscales para el estado, los municipios vía
aranceles e impuestos, aumenta la demanda de bienes y el consumo, crea fuentes
de empleo durante los procesos de producción, las actividades del sector
automotriz y del transporte están involucradas en el desarrollo de
numerosas actividades productivas conexas y directamente en la:
comercialización de vehículos y autopartes, mecánicas y talleres de servicio,
pintura, latonería, producción de combustibles y lubricantes y las de servicios
financieros y de seguros. Es imposible imaginar la recuperación progresiva del
país, en tanto por varios años más estará ligada a la explotación del petróleo y
el uso de la gasolina, sin mejorar sensiblemente el tránsito, la movilidad y el
transporte en Venezuela. El empobrecimiento masivo de densos sectores del país,
la dolarización de los costos y servicios vinculados al uso de vehículos, la liberación
y sincerización de los precios de lubricantes, aceites y gasolina
implicará una disminución importante del uso del auto particular y obligara a
mejorar la calidad, frecuencia y desarrollo del transporte público en
Venezuela.
Luego de 22 años de experimentó y puesta en
marcha de políticas públicas basadas en un modelo de concentración progresiva
de todas las actividades económicas y productivas alrededor del estado y
de generar paralelamente un rígido control de la actividad productivas privadas
y de mercado, corresponde analizar y hacer un balance objetivo de ellas y tomar
los correctivos, cambios y mejoras necesarias. Garantizar la sustentabilidad
del servicio, reducir las externalidades y procurar el desarrollo de unos
sistemas modernos de transporte público, amable, inteligente, verdes que
reduzcan sensiblemente la emisión de gases invernadero, es el reto del milenio
y de la próxima década.
Venezuela tiene 355 Municipios de diferentes
tamaños y densidad poblacional, Sí el gobierno asignará entre 10 y 50 unidades
a cada municipio, ciertamente una cantidad poco significativa para los
municipio medianos o grandes, pero que cubriría en los municipios pequeños
importante necesidades. Resolver el déficit actual requiere un piso entre
10.000 y 20.000 unidades nuevas y modernas, el gobierno ofrece que pondrá en
funcionamiento este año 2020, 2.000 nuevas unidades y recuperara otras 1000 que,
si bien son a gasolina o diesel cubrirían
sólo un tercio de las necesidades actuales, partiendo de la premisa de una recuperación
lenta de la economía del país, las necesidades reales superan las 20,000
unidades, entre transporte urbano, suburbano y extraurbano sí el objetivo es
garantizar, como afirman algunos que, el estado asuma el control operativo
total del servicio del transporte público.
Todo indica que eso no será posible en el corto y mediano plazo en la actual
coyuntura política y económica del estado venezolano, lo cual obliga a alianzas
estratégicas reales y efectivas con los operadores privados del transporte,
solicitar apoyo internacional de organismos multilaterales que ofrezcan créditos
blandos, con bajos intereses y periodos razonables de pago..Porque sí los
operadores privados no existieran hoy en Venezuela la tragedia humanitaria
sería considerablemente mayor. A pesar de todas las trabas, problemas y limitaciones
que presentan el transporte en la
actualidad la movilidad no serían posible en Venezuela sin la existencia de
ellos, a no ser que la cuarentena radical se prolongue indefinidamente y se
cierren por largo tiempo la comunicación entre municipios, entre estados, en el
país, entonces obviamente no se necesitara transporte.
Desde la ONG Transporte Unido Por Venezuela,
asociación que agrupa a transportistas de distintas líneas y estados han venido
haciendo propuestas con la intención de garantizar la sustentabilidad y
permanencia de los operadores privados del transporte público en Venezuela,
considerada por los sectores crediticios (Banca, empresas de seguro e
inversión) una especie en extinción, por su baja rentabilidad y por no contar
para ningún plan de desarrollo y fortalecimiento por el modelo propuesto por el
estado actual, el cual al contrario ha aplicado sistemáticas políticas con el
deliberado objetivo de debilitarlo y controlarlo. Por supuesto en muchos
aspectos lo ha logrado, sólo enfrenta una debilidad, la oferta del estado es ineficiente,
a pesar de los ingentes recursos invertidos en ella y contar en el país con una
planta china de fabricación (ensamblaje) de autobuses, para muestra un botón:
la decisión de suspender el servicio del metro Caracas (con graves problemas
operativos y de financiamiento) en días anteriores, como consecuencia de la
decisión de implementar la cuarentena radical tuvo que ser revertida rápidamente
anta la incapacidad funcional y operativa de las líneas estatales, socialistas
y Bolivarianas del sistema de transporte oficial., de cubrir la mínima demanda generada.
https://youtu.be/MBSuCkQevlk.
Angel Cacique. Coordinador Información y relaciones públicas TUxVzla. @angelcacique
caciquecatia@gmail.com. Telf: 04241685307. 02128621814.